Nocturnal
La luz se corrió
de su asiento,
y entre tú y yo volaron
las mariposas del silencio.
A la vuelta de la página
escribimos un haiku
con sal marina.
Un árbol se inclinó
dormido en su espesura.
El pájaro de sombra
insistió toda noche.
Y ya no vimos nada,
mas que las pupilas
de la soledad.
María A. Mónaco
2º Premio XXXII Concurso
Internacional de Poesía y Narrativa "Palabras sin fronteras", género
Poesía (Instituto Cultural Latinoamericano y Editorial Aries - Junin - Prov. de
Bs. As., Argentina, 17 de Noviembre 2012)
Por esas casualidades totalmente causales, ha llegado su libro a mis manos. En buena-hora que bajo el mismo techo como cielo, la igual perspectiva del oleaje y desde el ropaje taciturno de lo noctámbulo (aun siquiera, sin un desconocido en común) cuando uno observa ese pálido paisaje, la ciudad en lo más negro de la noche, se consuela con saber que algunas luces en forma de ventanas tan salteadas, alteran las sombras y quizás sean culpa de la poesía y otros poetas...
ResponderEliminarCordiales saludos, de un escueto poetastro a una poeta.
No claudique ni en una letra.
Nota: En su libro abundan. Benditos sean los puntos suspensivos…
Ya veo que, en ocasiones, el Universo… poblado de miles de constelaciones y estrellas, me ha obsequiado tu presencia en mi blog, “poetastro”! La luz que irradia de tus palabras brillará señalando una nueva etapa, quizás augurando un Nuevo Año en que ya tengo como firme proyecto mi segundo Libro, o quizás encontrando la forma de acercar Confluencias Nocturnas a un mayor numero de lectores, porque… al fin y al cabo… me interesa poder brindar (brindarme) tantos años de poesía ocultos en la sombra de un mismo cielo que nos renueva y nos inspira…
ResponderEliminarQue la brisa marina te traigan el mejor de los años, lo mejor de la vida.
Un saludo y agradecida por tu tiempo y tus palabras, de una simple mujer lírica a un PoetAstro!
Maria A. Mónaco